De Palomas Nucleares

Ayer noche, me sorprendí a mi mismo consiguiendo aguantar hasta las 5 de la mañana delante de un manual de ciencia política en Italiano. "GEOPOLITICA DE ASIA" es el título traducido claro está, el caso es que a fuerza de café, chocolate amargo y ronquidos de mi gran amigo Fulflys, resistí una tras otra las innumerables ocasiones en que mis párpados y mi cabeza decían, "Hasta aquí hemos llegado". Llegada la hora de retirarme a mi querido colchón de 3 pesetas, me detuve un momento junto a la ventana de la cocina, "Que hermoso amanecer" decía yo para mis adentros, "dentro de poco lo echaré de menos" etc etc... Y en esos momentos de calma infinita y musica de Enya y todo el royo New Age mostrándome el lado positivo de la vida la ví, allí estaba ella, "Todos los seres de la madre GEA son hermosos" (en esta ocasión no me lo creía mucho pero tenía que cumplir el papel) acercándose cual emisaria del averno, batía las alas y en el patio trasero del edificio retumbaban los cristales, Palomator había regresado, y de lo que pasó a continuación solo podré contar retazos, ya que son ese tipo de experiencias que hay que vivir.

Palomator, en una magistral maniobra digna de Manfred Von Richthofen cayó en picado unos 4 metros y con elegancia de ballet Ruso esquivó la antena de Tv del abuelete del 1º, tras este alarde se elevó como el que no quiere la cosa y pasó a escasos centímetros del aparato de aire acondicionado de fabricación coreana que usan en el despacho de enfrente, pero Palomator no había venido a darme clases de vuelo, no, ella y yo lo sabíamos. Nos miramos, en el fondo hay respeto mutuo, pero esa zorra implacable es el mismo lucifer salido de un huevo, como poniéndome sobre aviso, lanzó el primer ataque contra el albornoz de la vecina Ucraniana... sin palabras, 3 de 4 impactos, tamaño 5,56mm munición estandar de la OTAN, Ratatatatatatatata, segunda pasada, sobresaliente, albornoz liquidado y en dirección al 4º piso, en el, sus moradores ajenos al festival de caca y destrucción que estaba teniendo lugar a escasos metros de sus camas, dormían confiando en que sus CDs colgados cumplirían su misión, pero Palomator no teme a su reflejo, ninguna defensa pasiva podría pararla... Ratatatatatatatata aquel mantel era algodón de programa largo, ni siquiera lavarlo a 50º garantizaría su recuperación.
Pero yo si estaba allí, me la había jugado incontables ocasiones pero esta vez estaba preparado, o eso pensaba yo, con presteza me dispuse a recoger nuestros bienes del tendal, mis bañadores carísimos, las camisetas de Jaime, esa camisa de Tutto digna de museo de arte contemporaneo... pero fue inutil, percibió mi miedo, y provocó bajas.

Lo siento Fran, se que esa camiseta a rayas mola mogollón... pero ¿que puede un solo hombre contra semejante portento bélico?

Finalmente se marchó, incluso intuí un contoneo pícaro de su cola, cosas de la guerra Hermano "parecía decirme" y desapareció sobre la cúpula de la iglesia de Santa Ana.

Solo Dios sabe que hubiese sucedido de haber previsto su llegada, solo el altísimo conoce el hipotético desenlace de una batalla en igualdad de condiciones. Después de eso volví a mi cuarto y cuando fuí a cerrar el libro me di cuenta que el capítulo trataba de las potencias nucleares Asiáticas y su carrera armamentística... que ingenuos, pensé, gastando la milésima parte podrían dominar el mundo entrenando palomas...

He dicho